Entrevista Heidy

El sueño de Heidy

“Desde muy niña tuve un pie aquí y allá, entre Colombia y USA , de hecho terminé mi High School en Estados Unidos pero mi educación universitaria la hice allá(Colombia), me gradué en Psicología y cuándo llegué definitivamente para quedarme lo más importante era mi diploma universitario,que había guardado en la bolsa de la radiografía de tórax que debes llevar a la cita en la Embajada Americana. Mi identidad eran mis estudios”. Heidy Guzmán psicóloga colombiana, madre de tres hijos y residente en Roswell(GA), llegó en el 2002 a la nación americana con un propósito muy claro: ejercer su profesión y encontrarse con su madre después de casi 10 años de separación.

“ Tenía 26 o 27 años cuando llegué a Atlanta, traía conmigo una experiencia laboral notable en mi ciudad: había ejercido como terapista y trabajado cómo directora de un departamento de idiomas de un politécnico universitario, además de ser profesora de idiomas, vivía sola. Pero no podía ejercer. Experimenté una pérdida de identidad, de estatus y me di cuenta que la inmigración representaba un duelo: pérdida de amigos, carrera. A los tres meses no dormía ni comía, estaba desesperada por regresarme". Luego cayó en lo que ella misma auto diagnosticaría como una “depresión”. Se Percató de que no podría ejercer y que para lograrlo tendría que hacer cinco años de doctorado y comenzar desde cero.

Sorpresivamente, Heidy encontró trabajo como Counselor (consejero) en un centro para adolescentes con problemas de drogadicción. Antes de cumplir un año en el país, se postuló espontáneamente para la Latin America Association, la oficina más grande de Atlanta para inmigrantes hispanos. “Llegué, me presenté   y obtuve el cargo de gerente de departamento”. De ahí siguió una meteórica carrera de 12 años en el sector del Non Profit (asociaciones o fundaciones de trabajo sin ánimo de lucro en el sector social) en los Estados Unidos, en los que desarrolló importantes modificaciones en diferentes puestos de trabajo e instituciones. Guzmán aportó cambios sin precedentes,  tales como más de medio millón de dólares en becas para los hispanos.

También se desempeñó como Directora de Diversidad para la Boys and Girls Clubs of America, Cobertura de la población latinoamericana para la coalición Hispana de Georgia y Asesora independiente en la introducción de la la denominada Obama Care, la reciente reforma del gobierno del Presidente Obama en el Sector Salud. “Hubo un primer grupo de líderes hispanos en la Casa Blanca, entre esos estuvimos cincuenta personas. Yo fui la única en representar al Estado de Georgia, hablamos del impacto de la reforma de la salud y de los problemas en nuestra comunidad”

No obstante la importancia y el éxito de su vida profesional, Heidy sabía que realmente había abandonado su sueño: el ser psicóloga clínica, la perspectiva con la que partió de su país .

“Me propusieron concursar para el puesto de vice Presidente de diversidad cultural para la American Heart Association. Un reto tan emocionante a nivel nacional, pero no fui seleccionada. Esto me llevó a un momento de reflexión muy profundo y me dije: “Coloqué las escaleras del éxito en la pared equivocada, debo bajar y subir por aquella que realmente me hizo venir a este país, humildemente”. Heidy comenzó de nuevo a ejercer, a recordar lo que era tener un paciente de frente, descubrió que el doctorado en Psicología Clínica era aquello que deseaba seguir. Además analizó nuevamente el “Duelo Migratorio” que a su vez había estudiado con el Dr. Achotegui, a través de una maestría a distancia con la Universidad de Barcelona y que habia vivido al inicio de su propio proceso migratorio.

El retomar su carrera profesional, tanto a nivel práctico como teórico y las experiencias vividas la condujeron a elaborar su tesis del "Sueño Migratorio". Pero, ¿Cómo se llega a alcanzar el tan anhelado “Sueño Migratorio”? Todos pasamos por diversas etapas en nuestro proceso como inmigrantes. La Tesis de Heidy Guzmán establece que todo comienza con un Sueño o idea que nos transporta a otro país. Luego viene el viaje, la migración, el “Duelo Migratorio”, el proyecto de vida y en fin, el tan anhelado Sueño Migratorio que se retoma; ya que todo debe terminar dónde inició, es decir, llegar al punto de vista de donde partimos. No siempre es factible, según las estadísticas sólo un 2 por ciento de los inmigrantes en Estados Unidos llega finalmente a alcanzar ese Sueño.

Guzmán señala que durante el período del "Duelo Migratorio" hay tristeza, dificultad para conciliar el sueño, baja autoestima, falta de energía y concentración, todos los síntomas de una "depresión" están presentes y pueden permanecer hasta por seis meses. Si éste cuadro se prolonga hasta después de un año, puede diagnosticarse como una depresión verdadera. Muchos hispanas inmigrantes la padecen. A diferencia de la muerte de un ser querido, en la cual la pérdida es definitiva, en el "duelo migratorio" la pérdida es parcial, el país y tu familia están allá aunque sigue habiendo una comunicación por Skype o por otro medio. Es cómo estar en dos orillas al mismo tiempo y ésto conlleva a que la fase sucesiva, la del proyecto de vida no se lleve a cabo y por consiguiente; el Sueño Migratorio, fracase.

El inmigrante por principio es emprendedor. Numerosas son las historias de inmigrantes que han triunfado en sus propios términos. ¿Cuáles son sus atributos y qué podemos aprender de sus fracasos y de sus logros? Esa es la manera más práctica de acercarnos a reconstruir nuestro sueño migratorio. Examinando los obstáculos invisibles y la resistencia al éxito, nos disponemos a recalibrar la brújula de la vida.

Heidy Guzmán cumplió un sueño migratorio pero para lograrlo hay que ser persistente y perseverante, por lo cuál aconseja los siguientes pasos:

  1. Define tu Sueño Migratorio-No importa cuanto tiempo lleves en este país, solo importa que hoy puedas definir que metas quieres alcanzar, a donde quieres llegar, que logros quieres ver realizados.
  2. Piensa en lo que anhelabas antes de llegar, recorre mentalmente el camino transcurrido hasta ahora y cuales son ahora tus nuevos objetivos. Escríbelos, analízalos, vuélvelos a pensar, dilos en voz alta, revísalos y vuélvelos a escribir.

Nuestro viaje cómo madres en otra sociedad implica muchos retos, mantengamos nuestro sueño migratorio, nuestros hijos lo agradecerán.